MenúLa cerveza Litovel se elabora solamente con materias primas locales de la mejor calidad. La cebada para nuestra malta se cultiva en los campos fértiles de la región de Haná, el lúpulo proviene de las famosas regiones de Tršice y Žatec y, por supuesto, no falta la excelente agua local.
"La cerveza de Litovel siempre se elaborará de un modo clásico y honesto. Siempre nos hemos regido por este principio y nunca lo vamos a dejar de hacer así," Miroslav Koutek, maestro cervecero emérito de la cervecería Litovel
Desde el principio, elaboramos nuestra cerveza para diversos grados determinados con antelación. El mosto hervido y caliente pasa del cocedero a la cuba de torbellino. Allí se eliminan los posos coagulados, después el mosto puro se enfría durante media hora a la temperatura de fermentación, de cinco a siete grados centígrados. Después de enfriarse, al mosto se le añade la levadura cervecera. Este mosto fermentado se pasa a cubas abiertas de fermentación en la sala llamada bodega, donde empieza la fermentación principal. El proceso principal de fermentación dura más tiempo (7–10 días) a temperaturas bajas (10 °C). Durante la fermentación natural inferior en frío en la cámara de fermentación abierta es la cuando la levadura cervecera "actúa" de forma intensa y natural. Después de esta fermentación principal, la cerveza nueva termina de fermentar y madura en bodegas de lager, a una temperatura de alrededor de 1 °C. También allí la levadura cervecera sigue "actuando" . La cerveza permanece madurando en las bodegas de 20 a 100 días, según la fuerza de la receta. Cuanto más fuerte es la cerveza, necesita más tiempo de maduración. Durante la maduración, la cerveza se aclara, adquiere carácter y se llena de forma natural de dióxido de carbono. Para acabar se filtra y envasa.
El proceso clásico de elaboración y el respeto estricto a él son una regla inalterable para nosotros. El resultado de nuestro esfuerzo es una cerveza de sabor delicioso, de amargura equilibrada, un color dorado y con un sabor natural adecuado. La cerveza elaborada mediante el procedimiento clásico checo combina bien los dos mil ingredientes que contiene. En una cerveza así se conservan sustancias importantes para las personas que tienen una influencia favorable en el organismo.